Mustafa Kabakçıoğlu, un sargento de policía que fue destituido de su cargo por un decreto-ley, fue encontrado muerto en una silla de plástico en la celda de cuarentena de la prisión donde estuvo detenido durante 4 años. Las fotos del lugar del crimen tomadas el día en que murió el policía purgado, de 44 años de edad, la última petición que escribió al médico de la prisión y su diario revelaron la ilegalidad que experimentó durante 4 años.
Según informó Sevinç Özarslan de BoldMedya, en las fotografías Kabakçıoğlu se le ve sentado cabizbajo, con uñas moradas y las manos encima de piernas. La camiseta negra que llevaba puesta tenía manchas de polvo. Según el médico de la institución, se estima que Kabakçıoğlu murió entre las 02:00 y las 03:00 de la mañana. Se desconoce lo que pasó por la noche. Si presionó el botón de emergencia o no es un misterio. Si murió en la silla o no es visto con sospecha por su familia.
Kabakçıoğlu padecía de asma y diabetes. La pésima situación en la que se vio obligado a vivir se puede ver en las fotos tomadas en la celda. La pintura de las paredes de la celda de Kabakçıoğlu está desconchada. Tenía que dormir en un colchón colocado debajo de las escaleras. La cocina está bastante descuidada. Justo al lado de la cama de Kabakçıoğlu hay un aseo de estilo turco usado por toda la celda.
Se supo que el sargento fue encerrado en la celda de cuarentena por sospecha de Covid-19 el jueves 20 de agosto de 2020, y vivió solo en la celda D-2 durante 9 días. El resultado de la prueba realizada en el Instituto de Medicina Forense de Trabzon el día de su muerte fue negativo. Su cadáver salió de su celda, donde fue encerrado por sospecha de coronavirus, pero se registró que no estaba infectado con el coronavirus.
